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La fiscalidad en el Fit for 55

El pasado 4 de abril tuvo lugar la jornada dedicada a la fiscalidad en el “Fit for 55”, dentro del ciclo de jornadas englobadas bajo el título: “Hacia la neutralidad de emisiones con el paquete Fit for 55: implicaciones para España”.

El Club Español de la Energía junto a la Asociación Española para la Economía Energética (AEEE), la Cátedra BP de energía y sostenibilidad de la Universidad de Comillas, y Economics for Energy, organizaron un ciclo de jornadas englobadas bajo el título: “Hacia la neutralidad de emisiones con el paquete Fit for 55: implicaciones para España”.

El pasado 4 de abril tuvo lugar la cuarta, dedicada a la fiscalidad en el “Fit for 55”, en la que intervinieron, Vicente Hurtado, jefe de departamento de la Dirección General de Impuestos de la Comisión Europea; Andrés Guevara, presidente de BP España y Arcadio Gutiérrez, director general de Enerclub.

Arcadio Gutiérrez comenzó su intervención haciendo referencia a las propuestas legislativas contempladas en el primer paquete del “Fit for 55”, y cómo, dentro de éstas, la Comisión Europea consideró, tras la nueva legislación europea en materia energética y medioambiental, que es el momento de revisar el marco europeo sobre fiscalidad, sin actualizar desde 2003, y que es fundamental para reducir emisiones y la contaminación atmosférica.

El director general del Club anunció también que la Asociación tiene ya programada para los próximos meses unas jornadas sobre el segundo paquete del “Fit for 55”, centrada en el Hidrógeno y Gas Descarbonizado.

Según Andrés Guevara: “nuestro rumbo como empresa está alineado con el de la UE, queremos políticas climáticas ambiciosas y efectivas que nos ayuden a todos a llegar al nivel de cero emisiones netas. Pero es necesario que los cambios y objetivos recogidos en el “Fit for 55” proporcionen la certeza y seguridad jurídica necesarias para seguir adelante en nuestra propia transición como compañía, generando oportunidades y permitiendo el desarrollo de estos nuevos segmentos de negocio como el del propio hidrógeno verde, la infraestructura de recarga para la movilidad eléctrica o los combustibles de aviación sostenibles, siempre con especial atención a aquellos sectores más difíciles de descarbonizar”.

A su juicio, esta transición debe ser viable económica y socialmente. Los cambios recogidos en el “Fit for 55” deben generar certeza y seguridad jurídica para incentivar las inversiones. “Acogemos positivamente los marcos regulatorios bien diseñados, con vistas a medio y largo plazo”, concluyó el presidente de BP España.

Propuesta Directiva de Fiscalidad Energética

La propuesta legislativa de Directiva de Fiscalidad Energética o Energy Taxation Directive se centra en tres pilares. El primero, ayudar a cumplir los objetivos medioambientales de la Unión Europea a 2030 y 2050, armonizando la imposición de los productos energéticos y de la electricidad con las políticas comunitarias en materia de energía, medio ambiente y clima. El segundo, actualizar el ámbito de aplicación y la estructura de los tipos impositivos, así como racionalizar el uso de las exenciones y las reducciones fiscales por parte de los Estados miembros. Y, por último, mantener la capacidad de generar ingresos para los presupuestos de los estados miembros.

Esta propuesta ofrece algunos cambios para lograr los objetivos mencionados, entre ellos: pasar a una imposición basada en el contenido energético en lugar de la imposición basada en el volumen. Eliminar los incentivos para el uso de los combustibles fósiles e introducir una clasificación de tipos impositivos en función del desempeño ambiental, que simplifique la estructura impositiva en vigor.

A continuación, tomó la palabra Vicente Hurtado de la Dirección General de Impuestos de la Comisión Europea, presentado por Pedro Linares, del departamento de Organización Industrial de la Universidad Pontificia de Comillas y codirector de Economics for Energy.

Hurtado señaló que “el régimen fiscal para los productos energéticos debe salvaguardar y mejorar el mercado único y apoyar la transición ecológica mediante el establecimiento de los incentivos adecuados”.

Por este motivo, la Comisión presentó en julio de 2021, dentro del paquete “Fit for 55”, una propuesta de revisión de la directiva sobre la fiscalidad de la energía de 2003. La propuesta tiene como principal objetivo contribuir a la promoción de tecnologías limpias, a un incremento de la eficiencia energética y a la eliminación de exenciones obsoletas y tipos reducidos que actualmente fomentan el uso de combustibles más contaminantes. También persigue actualizar la cobertura de los productos energéticos y nuevos usos y técnicas para adaptarse a los recientes desarrollos en el mercado energético”.

Mesa expertos fiscalidad en España

En la mesa redonda que tuvo lugar a continuación, participaron expertos en materia de fiscalidad en España. Introdujo este panel su moderador, Miguel Ángel Lasheras.Pablo Renieblas (Deloitte). Esta directiva tiene opciones de ser aprobada. Las medidas introducidas equilibran los intereses de los estados miembros, lo que podría agilizar y favorecer las negociaciones. El principal elemento de discusión se centra en las exenciones.

Xavier Labandeira (Economics for Energy). España presentó el libro blanco que recoge la fiscalidad española en materia energética y ambiental con cuatro ejes de actuación: eliminar barreras a la electrificación, apuesta por la movilidad, la economía circular y el agua.

Juan Carpizo (EY). Destacó la relevancia de contar con seguridad jurídica a la hora de realizar cualquier reforma fiscal, y abogó por armonizar y coordinar la fiscalidad nacional con la autonómica y local, así como evitar la litigiosidad en materia fiscal.

Diego Rodríguez (FEDEA). Señaló que la gradualidad de los tipos es importante, ya que permite la adaptación de los diferentes agentes a los cambios con introducción de ciertas medidas de compensación.

Enrique Tejedor (PWC). La propuesta de directiva incluye sectores que tradicionalmente han estado exentos, como el transporte marítimo y el aéreo. No afecta a la unidad de mercado de la UE, ni genera impacto en términos de competencia de los estados miembros.


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