Durante la apertura, Arcadio Gutiérrez señaló que “estamos viendo actualmente sobre todo en los medios de comunicación, la gran atracción generada por la oferta de energía. Pero la demanda debe tenerse más en cuenta, ya que contribuye y contribuirá aún más en el futuro a una gestión más eficiente y sostenible del sistema energético, asociado al papel clave de las tecnologías, el marco regulatorio y los recursos económicos”.
Por su parte, Félix Monedero indicó que SAP está involucrado en muchos proyectos de innovación en el ámbito energético, como CEO Alliance, con 100 billones de inversión entre las compañías participantes para gestionar programas de descarbonización en diferentes industrias. SAP participa como líder en una de las iniciativas para el seguimiento digital de la ‘huella de carbono’ y en otras, aporta la plataforma tecnológica para gestionar el E2E de los procesos de creación de hidrógeno verde.
David Robinson, Senior Research Fellow of Oxford Institute for Energy Studies, destacó que la agregación de los recursos energéticos distribuidos por parte de empresas, que actúan como intermediarios entre los consumidores y los mercados, podría reducir sustancialmente el coste del sistema eléctrico. Al mismo tiempo, los agregadores facilitan la participación del consumidor en los mercados, beneficiando tanto a los consumidores que ofrecen la flexibilidad como a todos los consumidores. La UE requiere que todos los Estados Miembros apoyen la agregación, pero España todavía no tiene la legislación necesaria para su desarrollo. Es importante y urgente definir los principios básicos de la nueva legislación.
Para hablar de la flexibilidad y las redes de transporte, intervino Rosalía Rivas, jefa del departamento de Fiabilidad del Sistema Eléctrico de Red Eléctrica de España. El objetivo de REE en la integración de renovables a 2030 es del 74% para llegar al 100% en 2050. “Para cumplir los objetivos de descarbonización del Plan Nacional Integrado de Energía y Clima se requiere de un sistema eléctrico más flexible para contrarrestar la no controlabilidad del recurso renovable” (eólica y fotovoltaica principalmente).
La propuesta de planificación de la red de transporte para el periodo 2021-2026, que ha realizado Red Eléctrica como operador del sistema, propone la incorporación de nuevos elementos a la red de transporte, aprovechando los últimos avances tecnológicos como respuesta a las necesidades de flexibilidad del sistema y de un mayor uso de la red existente. El almacenamiento y las interconexiones serán los grandes aliados para gestionar la flexibilidad, reduciendo hasta un 50% las rampas en la producción gestionable. El desarrollo de nuevas interconexiones con Francia “es un pilar clave para la integración de renovable y permitirán reducir los vertidos de renovables en un 60% en 2030”. “Es necesaria la aprobación urgente de esta propuesta de planificación, así como su ejecución para asegurar que el despliegue de la red de transporte se desarrolle de manera acompasada con la instalación de nueva potencia renovable”.
Pedro Basagoiti, director de Tecnología, Innovación y Nuevos Desarrollos de OMIE, en relación a los mercados de flexibilidad, afirmó: “El proceso de transición energética en el que estamos involucrados tiene asociada una sustitución paulatina de tecnologías de producción fósiles por tecnologías renovables no gestionables, con un indudable efecto sobre el mercado de electricidad”.
“Con el fin de asegurar el éxito del proceso de transición, es necesario que, en paralelo al incremento de las instalaciones renovables, se desarrollen mecanismos de flexibilidad que permitan desplazar la producción y el consumo en función de la mayor o menor producción renovable existente en cada instante. OMIE, como operador del mercado de la electricidad, está trabajando en colaboración con otras entidades nacionales y europeas en el diseño de las evoluciones del mercado actual y el desarrollo de nuevos mercados de flexibilidad, que aseguren el desarrollo y la adecuada utilización de estos mecanismos de flexibilidad”. En este nuevo escenario, el protagonismo del consumidor es cada vez mayor, con un papel cada vez más activo.
En representación de los comercializadores y agregadores independientes, participó Alicia Carrasco, directora ejecutiva de Entra Agregación y Flexibilidad. A su juicio, “la participación de la gestión de la demanda en España en los servicios de balance hoy en día ya es una realidad. Aun así, es necesario que el ministerio de Transición Energética y la CNMC aceleren cambios normativos que permitan la participación de la agregación de la demanda en igualdad de condiciones en todos los servicios y mercados existentes”. Actualmente solo los comercializadores pueden facilitar esta participación, no así el agregador independiente.
Jordi Masip, Industry Value Advisor de SAP, expuso que la plataforma de flexibilidad energética debe garantizar multiusuario y multiservicio: agregadores, comunidades energéticas, consumidores y generadores. Consideró que hay que habilitar una semántica común que facilite integrar nuevas aplicaciones y servicios en un mismo hub compartido y global; privacidad y seguridad para asegurar altos estándares de mercado que generen la confianza de los diferentes participantes, y la gestión de altos volúmenes de datos, estructurados y no estructurados.
La mesa redonda sobre flexibilidad y redes de distribución, moderada por Juan Luis López, profesor del IESE, contó con la participación de: Francisco Espinosa, socio director de la Asociación de Consumidores de Electricidad (ACE); Juan Miguel Sánchez, Chief Operating Officer de redes de España de Edp; Daniel Davi, New Business Opportunities Development de Endesa; Juan Luis Ríos, director de Planificación y Regulación de i-DE, distribuidora de Iberdrola España y Manuel Delgado, director de Servicios Jurídicos, Regulación y Gestión de Ingresos de las Redes de Electricidad de Naturgy.