Los representantes de los distintos partidos políticos que participaron en esta sesión fueron, por orden alfabético: Vicente Ten, de Ciudadanos; Idoia Sagastizabal, de EAJ-PNV; Joan Capdevila, de ERC; Diego Gago, del PP; Luis Atienza, del PSOE; Juan Antonio López de Ugalde, de UP y Patricia Rueda, de Vox. Todos presentaron a los XX asistentes, las principales líneas incluidas en sus programas electorales en materia energética.
Ciudadanos, apostó por contar con un pacto de estado y con la seguridad jurídica necesaria para atraer inversiones, así como por romper con la politización de los organismos reguladores. Cree necesario acometer una reforma integral, basada en tres pilares: economía liberal, sostenible y circular, enfocada a la eficiencia energética; fomento de las interconexiones; liberalización y competencia, y al desarrollo de las energías renovables, pero de manera pensada y no improvisada.
PNV, quiere duplicar la generación de renovables, pasando del 8 al 15%, con el 100% de origen renovable, y conjugar el medio ambiente con la regulación y las inversiones. Entre sus medidas, destacaron el fomento del biogás, la eólica y la biomasa; el gas como energía de respaldo; la pobreza energética; la fiscalidad verde y la cogeneración. También abogan por una regulación estable y predecible que atraiga inversiones.
ERC, entiende la transición energética como un cambio también de modelo socio económico, acompañado por la sociedad civil y una clara voluntad política. La transición debe pivotar sobre la digitalización y los ODS. Entre sus propuestas: la electrificación para aportar flexibilidad a la red; la movilidad (transporte público y privado eléctrico); el clima (geotermia) y el calor industrial (biomasa, gas sintético).
Desde el PP, apuestan por una transición justa y razonable, y por un pacto de estado sobre energía y clima que despeje la incertidumbre en el consumidor final, en aspectos como el transporte y la distribución. Entre sus iniciativas: apuesta por las renovables, pero de forma coherente, con inversión e incentivación en I+D+i; movilidad sostenible y ley de cambio climático.
El PSOE, destacó que el objetivo de descarbonización a 2030, 2040 y 2050, redundará en una mejora de la calidad del aire y, por tanto, en una mejora notable de la calidad de vida. Apostó por la transición justa, con medidas de compensación para que nadie se quede atrás; la competitividad, como palanca de reindustrialización a través de la digitalización; la eficiencia energética, más allá de los compromisos internacionales; la electrificación; la movilidad eléctrica y potenciar el transporte público.
Entre las medidas propuestas por UP: garantizar el derecho a la energía; la transición justa; la garantía de suministro; un plan de pobreza energética y fiscalidad más severa para los que contaminan. Para poder asegurar su cumplimiento, consideran necesaria la creación de una empresa pública de energía.
Para Vox, la política energética debe ser un asunto de estado. Apuestan por la seguridad de suministro, la competitividad, el respeto al medio ambiente, la generación y el transporte, la simplificación de normativas, aumentar el peso de la industria y menores impuestos y costes regulados.
Preguntas de los asistentes
Sobre la transición energética justa, preguntaron por la posibilidad de aplicar la política de doble dividendo, con un impuesto al CO2 cuya recaudación, se repartiría equitativamente. PNV dijo que parte de la fiscalidad podía ir al fondo de eficiencia energética y utilizarse en políticas de I+D+i. El PP, se mostró más partidario de la incentivación que del gravamen.
Sobre el encarecimiento de la energía eléctrica a la industria, abogaron por un pacto entre la política energética y la industrial, para favorecer su competitividad.
Los asistentes preguntaron por la hoja de ruta de la transición, las medidas globales de cada partido en el caso de que gobernaran, su parecer sobre el PNIEC, el autoconsumo, la convocatoria de subastas para la integración de renovables; la competitividad de la industria aprovechando la energía eólica y la fotovoltaica; el mix energético para los próximos años; mecanismos de capacidad y seguridad; gestión de la demanda; estabilidad de precios y la rentabilidad razonable.